Santiago, 02 de mayo del 2023.-

Este primero de mayo recién pasado, para nosotros como Subsecretaría de Telecomunicaciones, no sólo fue una fecha de conmemoración relevante en cuanto al reconocimiento del rol de las y los trabajadores en el desarrollo del país, sino también fue el inicio del Mes de las Telecomunicaciones. 

Cada 17 de mayo se celebra el día mundial del Internet y las Telecomunicaciones; sin embargo, este año desde Subtel quisimos celebrar durante un mes el rol que tiene la conectividad digital en nuestra cotidianidad. Un mes para visibilizar no solo los beneficios de Internet, sino más bien, lo que es capaz de hacer en la vida de las personas. 

En mi rol como Subsecretario, he visitado todas las capitales regionales y provinciales del país. He visto cómo la digitalización mejora la calidad de vida de las personas, pero también, cómo estar fuera de ella acentúa las grandes brechas y desigualdades en cuanto a oportunidades de desarrollo personal y profesional. 

Durante este tiempo he visto cómo mujeres han logrado la autonomía económica gracias a la digitalización de sus emprendimientos o pymes; cómo estudiantes de los rincones más apartados del país pueden acceder a la misma información y conocimiento que niños y niñas de Santiago, mejorando así sus procesos de aprendizaje. Pero también he visto cómo pescadores artesanales del norte del país han perdido el fruto de su trabajo y por ende sus ingresos, por no poder rellenar los formularios en línea;  y cómo adultos mayores tienen que trasladarse kilómetros a una capital regional, para tomar hora en un consultorio o realizar un trámite que bien podrían hacer en línea. 

Esto nos habla de la necesidad urgente de avanzar en la reducción de la brecha digital, pero también de pensar el presente y futuro comprendiendo que la conectividad digital es un derecho básico y que es deber del Estado poder garantizarlo, porque al hacerlo estamos mejorando la calidad de vida de las personas. 

En el mes de las telecomunicaciones tenemos que destacar cuánto hemos avanzado, pero también cuáles son los desafíos que tenemos por delante. Y sin duda, uno de ellos es preparar a las y los trabajadores de hoy y mañana para un futuro digital, donde el desarrollo de la inteligencia artificial y la automatización de los procesos van a complejizar la situación actual de miles de trabajadores y trabajadoras del país. Tenemos que prepararnos y educarnos digitalmente. Eso significa que debemos entregar las herramientas necesarias para incorporar a todas las personas a un mundo que ya es digital. 

Pensar digitalmente para un futuro conectado, es hacernos cargo como Estado, pero también con  todos los actores del sector (empresas, fundaciones, academia, etc.) de este y todos los desafíos que tenemos en materia de conectividad. Es prepararnos para que las herramientas digitales cumplan con su objetivo: mejorar la calidad de vida de las personas, en todas sus dimensiones. Pensar digitalmente es poner en el centro la necesidad de acortar brechas, para tener un Chile mejor conectado, equitativo y desarrollado.

Claudio Araya, Subsecretario de Telecomunicaciones.